Quote of the Month

Try not to become a man of success but a man of value.
Albert Einstein

A leader is one who knows the way, goes the way, and shows the way.
John C. Maxwell

26 abr 2011

Análisis “Documental la Vida Loca”


"La Vida Loca" describe la vida real y deprimente de miles de jóvenes que se unen a las Maras (pandillas) en El Salvador. Es la verdadera vida allá.      Durante casi un año el director Christian Poveda se infiltra de una de las principales agrupaciones pandilleras de El Salvador, La Mara 18, pandilla integrada por jóvenes tatuados de la cabeza a los pies que se dedican principalmente a la extorsión, al robo y al tráfico de drogas.  Un documental sobre la soledad humana absoluta.

La filmación tuvo lugar en la comunidad de La Campanera donde vive la totalidad de los pandilleros que aparecen en el documental.   Filmada con cámara el director recoge la cotidianidad de miembros de dicha agrupación pandillera que se caracteriza por tener su propio lenguaje, tatuajes, códigos y elevados niveles de agresividad, violencia y criminalidad.   Cuando te das cuenta que no es actuado y que es real lo que estás viendo en pantalla es muy duro. Estas pandillas son detestables pero a la misma vez cautivadoras ya que son un reflejo de la sociedad.  En este documental muestran que mas allá de ser jóvenes que quieren pertenecer a pandillas y ser parte de un grupo, pasan a formar parte de verdaderas bandas de crimen organizado que luchan por controlar las zonas bajo su protección.


Detrás de los tatuajes que cubren los cuerpos de los pandilleros juveniles, existe una sofisticada estructura organizativa y jerárquica que rige a las Maras, para profesar su propia religión: “vivir la vida loca”.  

Estos grupos claramente tienen una organización preestablecida, son grupos guiados por un líder al cual siguen y rinden pleitesía. 

La expresión máxima de su organización es el 'programa', que abarca al conjunto de 'clicas' o pandillas de barrio. La figura clave sería 'el corredor', designado para coordinar y conducir la 'clica', por sus muestras de honor, disciplina y coraje.  

Quienes lideran las Maras son por lo general, las personas de mayor fuerza y mejor capacidad de pelea. Generalmente el liderazgo se encuentra en manos de los veteranos, los jóvenes tienen una marcada tendencia a decir que en el barrio son todos iguales y que por ende, todos son jefes.  Estos líderes tienen muchas funciones entre las cuales está mantener control sobre su territorio, fomentar la unidad del grupo y reclutar a nuevos miembros a los cuales incluyen después de haber cumplido con los rituales de iniciación.

Sentimiento de pertenencia e identidad

Allí no solo se marcan las lealtades, sino que también el sentimiento de pertenencia para la pandilla.   Existen diversas formas de integración a la mara les llaman rituales de iniciación.  Para esto los nuevos integrantes deben de pasar por peleas entre nuevos habitantes y viejos miembros de la pandilla para conocer las habilidades; robar un carro, matar o herir a otras personas, cometer una violación, agredir a un policía, en el caso de las mujeres que quieran iniciarse como deben de tener relaciones sexuales con los hombres de la mara.

Tal como lo muestra el documental, estos sujetos necesitan pertenecer a estas asociaciones ilícitas  ya que encuentran una oportunidad de desarrollarse y encontrar en otros jóvenes apoyo y sustento que carecen.
La mayoría proviene de hogares pobres, sin ingresos suficientes para el mantenimiento o desarrollo, desintegrados con ejemplos de violencia intrafamiliar por medidas arbitrarias de sus mayores y sin el aprendizaje regular de la escuela, que tiene alta tasa de abandono. Para cada integrante pertenecer a estos grupos significa tener un referente a seguir, un modelo, siendo las Maras su familia.

Ambiente

Los miembros de las viven en un ambiente de violencia naturalizado, por lo que el empleo de la misma es entendido como correcto a la hora de resolver cualquier conflicto. Claramente la violencia se presenta como una salida frente a las problemáticas y se ve reflejado en la filmación del documental.

Valores, existirá la ética en el grupo

No creo que tengan valores firmes … tendrán un concepto erróneo de lo que es la moral, la ética, los valores humanos en general.  Sin embargo, entre ellos existe un vínculo que podría considerar inexplicable. 

El peor delito que un pandillero puede cometer en perjuicio de la pandilla es abandonarla e integrarse a su archirrival. Ese acto es considerado como “la máxima traición”, y se paga con la vida, que se ejecuta sin mayor trámite y de forma despiadada.  Existe de alguna manera respeto al líder, a sus creencias, a sus ideales.  Tienen un objetivo en común y son leales entre ellos. 

Comunicación

Se comunican de diferentes formas, se observa claramente desde la vestimenta, con el simple hecho de que caminan en grupo, los tatuajes que llevan, las senas que utilizan, sus gestos, sus expresiones, el lenguaje el cual es una mezcla de idiomas, los grafittis entre otros.

En el documental se puede observar como marcan su territorio, y en la mayoría de los casos que les distingue de otros grupos.

Tiene solución??

Las Maras pueden llegar a ubicarse en todo el territorio de nuestro país de suceder esto se producirá un fuerte quiebre en la seguridad de la sociedad porque el orden social estará en cuestionamiento más que nunca.

La delincuencia juvenil es principalmente un fenómeno grupal que refleja situaciones sociales y económicas complejas; por lo tanto, como país debemos de tener amplios conocimientos actualizados y concretos que nos ayuden a lograr el diseño y la aplicación de políticas y programas de acción para evitar el crecimiento de dichos grupos.

Si no se hace un cambio en la sociedad, sino se educa y se enseña a discernir entre el bien y el mal, entre el esfuerzo y recompensa, entre una familia y amor, el de dar y no recibir no lograremos cambiarla …  Yo creo en que la situación de cada uno de estos jóvenes puede cambiar, creo en educar a la población, capacitar a las futuras generaciones, crear fuentes de trabajo que sean bien remuneradas, fomentar el deporte de calidad a nivel profesional, inculcarle a las personas valores morales, éticos y espirituales, educar a los padres de familia, el asunto es complejo, pero no imposible.